No quiero poseerte
no miraré eternamente
tus ojos
ni mi reflejo
no en tus manos
quiero estar
por siempre
No quiero poseerte
vivirme en tus sonrisa
morirme en tus palabras
No quiero que seas
mía
sólo mía
nada más
¿Qué haría yo entonces
si vivieras
de mi pecho
y fuera éste
cárcel tuya?
¿Cómo te desearía?
¿Cómo viviría
sin buscar la manera
diariamente
cada segundo
de acercarme a ti?
Deseo tu presencia
latente
tu corazón fugaz
tu máscara frágil
mutante
No quiero poseerte
quiero jugar:
al gato
al ratón
a la vida
a la muerte
al abejorro
a la flor
a la nube
al mar
al sol
Quiero vivirte de lejos
como paisaje
como cielo despejado
como luna
como raíz
como halcón
No quiero poseerte
quiero sentarme junto a ti
entre pastizales
lagos
y desiertos
entre amigos viejos
y nuevos
No quisiera nunca
amor
saberte roca
montaña patente
risco muerto
No quisiera poseerte
y dejarte sin alas
y perder yo
el alto vuelo
que mereces
MayoCEROnueve
viernes, 29 de mayo de 2009
martes, 26 de mayo de 2009
Reencuentro
te conozco
aunque lo niegues
aunque tu memoria
ciega te engañe
te he visto antes
te conozco
te he visto caminar
reír
reconozco tu voz
en sueños
en cuentos
en vidas
mías y de otros
te conozco
aunque lo niegues
sabía cómo era tu olor
y el calor de tu garganta
conocía tu pelo
tengo, pelo tuyo
en mis dedos enredado
en mis otros dedos
en los de antes
en esos dedos
en esas risas
en los contornos
de tus costillas
olvidados ya por ti
te conozco
y me niegas la verdad
(el recuerdo)
la verdadera historia muerta
del primer encuentro
nuestro
¿para qué negarlo?
¿para qué vivir cegados?
¿para qué vivir lejos y amargados?
te conozco
y me conoces
nos conocimos
años atrás
en alguna guerra
o fiesta
en algún rincón del bosque
un momento
sí, pero bastó
un momento
que al soltarlo
apareció
(de nuevo)
un momento que nunca se perdió
te conozco
he sentido tu piel
he escuchado esas palabras
que el amante dice
al irse
y que el amado escucha
esperando verle volver
te conozco
¿por qué no me crees?
MayoCEROnueve
aunque lo niegues
aunque tu memoria
ciega te engañe
te he visto antes
te conozco
te he visto caminar
reír
reconozco tu voz
en sueños
en cuentos
en vidas
mías y de otros
te conozco
aunque lo niegues
sabía cómo era tu olor
y el calor de tu garganta
conocía tu pelo
tengo, pelo tuyo
en mis dedos enredado
en mis otros dedos
en los de antes
en esos dedos
en esas risas
en los contornos
de tus costillas
olvidados ya por ti
te conozco
y me niegas la verdad
(el recuerdo)
la verdadera historia muerta
del primer encuentro
nuestro
¿para qué negarlo?
¿para qué vivir cegados?
¿para qué vivir lejos y amargados?
te conozco
y me conoces
nos conocimos
años atrás
en alguna guerra
o fiesta
en algún rincón del bosque
un momento
sí, pero bastó
un momento
que al soltarlo
apareció
(de nuevo)
un momento que nunca se perdió
te conozco
he sentido tu piel
he escuchado esas palabras
que el amante dice
al irse
y que el amado escucha
esperando verle volver
te conozco
¿por qué no me crees?
MayoCEROnueve
Al gato y al ratón...
Y el gato
buscando
al ratón
detiene
sus ojos
y corazón
espera quizá
una pared
moverse
una montaña
volar
y el ratón
paciente
olisquea
rasca
el ambiente
desesperando
el cazado
al cazado
buscando
al ratón
detiene
sus ojos
y corazón
espera quizá
una pared
moverse
una montaña
volar
y el ratón
paciente
olisquea
rasca
el ambiente
desesperando
el cazado
al cazado
lunes, 25 de mayo de 2009
viernes, 22 de mayo de 2009
Buen día
La noche oscura pero cálida
de la costa
el incesante doblez de las olas
el sabor húmedo de la sal
el horror de una muerte lenta
la esperanza del amanecer
se cierne incierta
y fría sobre mis ojos
Nunca estuvo más bella la luna
nunca más presente el fulgor
escondido del sol
MayoCEROnueve
de la costa
el incesante doblez de las olas
el sabor húmedo de la sal
el horror de una muerte lenta
la esperanza del amanecer
se cierne incierta
y fría sobre mis ojos
Nunca estuvo más bella la luna
nunca más presente el fulgor
escondido del sol
MayoCEROnueve
jueves, 21 de mayo de 2009
Fantasma del río
Caía aún una llovizna
la tormenta alejándose iba
"Paciencia que el río
junto a ti
fluye todavía"
¿cuándo viniste,
fantasma del río
dejando flores
en mi camino?
MayoCEROnueve
la tormenta alejándose iba
"Paciencia que el río
junto a ti
fluye todavía"
¿cuándo viniste,
fantasma del río
dejando flores
en mi camino?
MayoCEROnueve
martes, 19 de mayo de 2009
Memoria
Algo más
te contaré
nada tiene que ver
ni contigo
ni conmigo
nada tiene que ver
y lo explica todo
al comienzo nada
había
y Dios
creó todo lo que él
quería:
cielo
mares
montañas
aire
agua
fuego
tierra
alma
nada tiene que ver
te lo decía
pocos animales
cruzaban entonces
los caminos verdes
las llanuras hondas
y la vida estaba ahí
presente, envolvente
invisible
la lluvia volvía
con el sol
y las nubes
detrás
acosándolo
sin fervor
alcanzándolo
sin amor
y el sol
seguía
el agua
caía
de tú y yo
nada había
te lo dije
al pasar los días
la muerte apareció
cegando al sol
amaneciendo a la luna
y a todo animal
asustó
¿quién era ella?
detrás perseguía
adelantándose abría
caminos inciertos
peligros repletos
de serpientes
hoyos y rimas
¿quién era ella?
si yo, nube,
alcanzaba el cielo
tocaba al sol
¿quién era ella?
si tú, sol,
cálido y dulce
sonreías
¿quién era ella?
si Dios...
¿quién diablos era ella?
una flor huyó
de la muerte
fresca, fragante suerte,
y jamás nadie
a verla volvió
jamás nadie
la escuchó reír
ni olió
¿qué flor era aquella?
que nada dio
que no volvió
con manos llenas
un escarabajo lloró
su desaparición
y quiso
al instante
morir
fue a ver
a la muerte
para pedirle
lo llevara a él
no cedió la muerte
y pidió silencio
pues ella buscaba
aún
la flor verde
incierta
viva
repleta
¿dónde fue?
sabe usted
que no dejó
ni rastro
ni hueco
ni sed
yo lo sé
dijo él
y no sé
donde fue
hubo un tal
otro incidente
de muerte
vida y suerte
un ave feliz
un racimo de plumas
que llevó, a la muerte,
a buscar a la flor
y la encontró
la flor vivía
aún
recordaba a viejos
tiempos
olía a lejanos
alientos
a montañas verdes
a tristes pastos
y largos meses
y el ave y la muerte
rodeados de este olor
resplandecidos de amor
olvidaron su camino
y dejaron su suerte
hoy, así,
las aves cantan
historias viejas
trágicos destinos
la muerte
olvidaba ya
el presente
y vive persiguiéndote
por tu pasado
sin importarle
tu futura suerte
MayoCEROnueve
te contaré
nada tiene que ver
ni contigo
ni conmigo
nada tiene que ver
y lo explica todo
al comienzo nada
había
y Dios
creó todo lo que él
quería:
cielo
mares
montañas
aire
agua
fuego
tierra
alma
nada tiene que ver
te lo decía
pocos animales
cruzaban entonces
los caminos verdes
las llanuras hondas
y la vida estaba ahí
presente, envolvente
invisible
la lluvia volvía
con el sol
y las nubes
detrás
acosándolo
sin fervor
alcanzándolo
sin amor
y el sol
seguía
el agua
caía
de tú y yo
nada había
te lo dije
al pasar los días
la muerte apareció
cegando al sol
amaneciendo a la luna
y a todo animal
asustó
¿quién era ella?
detrás perseguía
adelantándose abría
caminos inciertos
peligros repletos
de serpientes
hoyos y rimas
¿quién era ella?
si yo, nube,
alcanzaba el cielo
tocaba al sol
¿quién era ella?
si tú, sol,
cálido y dulce
sonreías
¿quién era ella?
si Dios...
¿quién diablos era ella?
una flor huyó
de la muerte
fresca, fragante suerte,
y jamás nadie
a verla volvió
jamás nadie
la escuchó reír
ni olió
¿qué flor era aquella?
que nada dio
que no volvió
con manos llenas
un escarabajo lloró
su desaparición
y quiso
al instante
morir
fue a ver
a la muerte
para pedirle
lo llevara a él
no cedió la muerte
y pidió silencio
pues ella buscaba
aún
la flor verde
incierta
viva
repleta
¿dónde fue?
sabe usted
que no dejó
ni rastro
ni hueco
ni sed
yo lo sé
dijo él
y no sé
donde fue
hubo un tal
otro incidente
de muerte
vida y suerte
un ave feliz
un racimo de plumas
que llevó, a la muerte,
a buscar a la flor
y la encontró
la flor vivía
aún
recordaba a viejos
tiempos
olía a lejanos
alientos
a montañas verdes
a tristes pastos
y largos meses
y el ave y la muerte
rodeados de este olor
resplandecidos de amor
olvidaron su camino
y dejaron su suerte
hoy, así,
las aves cantan
historias viejas
trágicos destinos
la muerte
olvidaba ya
el presente
y vive persiguiéndote
por tu pasado
sin importarle
tu futura suerte
MayoCEROnueve
Adiós
a ti...
Te hice florecer
alguna vez
atrás
junto al río,
llevaba
agua, lo sé,
y dormimos
bajo las flores
sobre sus pétalos
en pantalones
faldas y calzones
¿Cómo olvidarte?
¿Cómo decir:
se perdió todo
no hubo sueño
no hubo pétalos
ni río
ni agua
ni sombra
bajo las flores?
Y desperté
y tú conmigo
y lloramos
el río
se había ido
en tus sueños
seguía el zumbido
de las rocas bajo el agua
en tus sueños vivía
tu imagen y la mía
renacida
Y me culpas hoy
de haber despertado
de haberte echado
fuera del sueño
bajo una cabaña
sin olvido
¿Cómo entenderte
si mi sueño
ya dormía
y la luz del sol
se cernía
junto a ti
y era cálida
y era tiempo
de partir?
¿Cómo entenderme
si tu sueño
profundo
vivo
en las aguas
nadaba
del río?
un adiós
un despertar
un eterno ir
sin retornar
Adiós, amor, adiós, perdón
MayoCEROnueve
Te hice florecer
alguna vez
atrás
junto al río,
llevaba
agua, lo sé,
y dormimos
bajo las flores
sobre sus pétalos
en pantalones
faldas y calzones
¿Cómo olvidarte?
¿Cómo decir:
se perdió todo
no hubo sueño
no hubo pétalos
ni río
ni agua
ni sombra
bajo las flores?
Y desperté
y tú conmigo
y lloramos
el río
se había ido
en tus sueños
seguía el zumbido
de las rocas bajo el agua
en tus sueños vivía
tu imagen y la mía
renacida
Y me culpas hoy
de haber despertado
de haberte echado
fuera del sueño
bajo una cabaña
sin olvido
¿Cómo entenderte
si mi sueño
ya dormía
y la luz del sol
se cernía
junto a ti
y era cálida
y era tiempo
de partir?
¿Cómo entenderme
si tu sueño
profundo
vivo
en las aguas
nadaba
del río?
un adiós
un despertar
un eterno ir
sin retornar
Adiós, amor, adiós, perdón
MayoCEROnueve
jueves, 14 de mayo de 2009
Voy
con mis miedos
mis costras
mis defectos
Voy
de brazos abiertos
pulmones llenos
labios ciertos
Voy
con Dios
en corazón
a nuestro encuentro
Voy con lo que soy
MayoCEROnueve
mis costras
mis defectos
Voy
de brazos abiertos
pulmones llenos
labios ciertos
Voy
con Dios
en corazón
a nuestro encuentro
Voy con lo que soy
MayoCEROnueve
miércoles, 13 de mayo de 2009
yo, tú, él (debralle)
La importancia de salvar la Naturaleza, la Vida, el Ecosistema o la Tierra no es un tema ético, sino de supervivencia de nuestra especie. Si la vida ha creado un ser destructor, que no puede vivir sin extralimitarse, entonces, éste está destinado a desaparecer.
Una manada de búfalos que acaba con un pastizal y luego con otro, hastar exterminar su fuente de alimento, no pensará que el error está en su intempestuosa hambre; su sentimiento de dolor, hambre e insatisfacción se deberá (según el búfalo) a la falta de alimento y su reacción será continuar la búsqueda hasta la muerte o el encuentro con otro pastizal.
Por el contrario, los humanos, que tenemos hermosas capacidades de crear un mundo hermano dentro de nosotros y compararlo constantemente con el real (a partir de las sensaciones) hemos llegado a comprender que la extinción de especies, la contaminación y el abuso a nuestros semejantes es una consecuencia de nuestros actos y no de la carencia del exterior. Nuestra reacción, la de algunos, es replantear nuestra manera de encontrarnos con la Naturaleza y con nuestros semejantes.
El búfalo, empero, vive en nosotros y buscamos otros planetas que devorar y nos olvidamos que no es el contexto el cojo, sino nuestro espíritu soberbio y ciego.
Pensemos al hombre en relación contextual (él con sus sensaciones): tiene 3 tipos de relaciones:
Yo-Yo / Yo-Tú / Yo-Él
La primera es la raíz de las otras, está en relación directa con éstas y las tres se modifican entre sí. La segunda (Yo-Tú) te acoje o expulsa y da diversidad dentro de un grupo; a ésta la puedes modificar. La tercera (Yo-Él) te crea o destruye y te da identidad; ésta te modifica. El pasado está relacionado con la segunda (mundo del recuerdo), el presente con la primera (mundo de las sensaciones), la tercera con el futuro (fantasía).
La compasión frente a la adversidad (un Él total y completo, absorbente) nace de la transformación del otro (yo-él) como yo-tú. No podemos contra este Él devorador y pensamos mejor en apartarnos. Esto hace que nos apartemos de los otros (que viven en más peligro de caer en el Él) y nos acerquemos a otros (con menos peligro de caer en el Él). Estaría bien leer a Freud y apoyarme en él para entender mejor sus relaciones ello-yo-superyó.
Sentir compasión es ponernos en peligro de muerte, porque es aceptar que nos acercamos a una persona que está en más riesgo que nosotros. Nuestro instinto de superviviencia nos aleja, entonces, de los otros, diciéndonos que estaremos más a salvo solos (lejos del peligro simbolizado por ese otro que sufre).
La realidad es muy distinta y lo han aprendido los mamíferos (que sobrevivieron a los dinosaurios en épocas dramáticas). Si se va en grupo, es mejor, a menos que el grupo vaya en contra del individuo (dictadura). Tal vez por esta cualidad de ver "más allá de lo evidente" , de tener un mundo hermano dentro. Me pregunto si los seres humanos somos los únicos que vemos peligro en nuestro grupo y lo convertimos en parte de nuestro contexto tenebris, nuestro grupo yo-tú se convierte en un yo-él y los que forman parte de ese grupo se convierten en yo-tú enemigos... (Más adelante debería profundizar en la relación yo-tú / yo-yo / yo-él dentro de los grupos... por ejemplo, un grupo yo-tú tiene integrantes yo-él... yo-yo en un grupo yo-tú se vuelve yo-él... y viceversa)
Es por ello que, a pesar de ser sociales y de que nuestro instinto nos impulsa a ayudar al otro, al mismo tiempo, otro instinto nos hace alejarnos del otro
La concepción del mundo del hombre debe necesariamente dudar de sí misma, si aceptamos que la realidad interna se pelea con la "social" y con la absoluta. La interna entre más equilibrada esté entre la social y la absoluta y la desconocida, más eficiente será y menos ignorante, más sabia y flexible.
La realidad del Hombre es dual por naturaleza y por esa cualidad es siempre e infinitamente repetible (fractales), como un rayo que se bifurca y esa bifurcación crea bifurcaciones en sí misma, hasta el infinito.
Por eso, las relaciones de pareja (encontrar o aceptar al otro como yo-yo) son tan complicadas y desestabilizantes para el yo-yo. Porque estar frente al otro dentro de nosotros mismos modifica nuestra concepción de nosotros mismos.
Es posible que el aferramiento del cerebro a relacionar de la misma manera nuestro contexto con nuestras sensaciones tenga que ver. Más bein con los coordinadores mentales de estas realidades. ¿Cómo, si la mente coordinador dice X, aceptar que la realidad diga Y?
Volvemos a la necesidad constante de decidir debido a la contradicción. Sin contradicción, sin paradoja, sin encuentro, sin ironía no hay decisión, no hay movimiento.
Leer Adonis, seis notas al lado del viento. El poeta y su trabajo #30
Una manada de búfalos que acaba con un pastizal y luego con otro, hastar exterminar su fuente de alimento, no pensará que el error está en su intempestuosa hambre; su sentimiento de dolor, hambre e insatisfacción se deberá (según el búfalo) a la falta de alimento y su reacción será continuar la búsqueda hasta la muerte o el encuentro con otro pastizal.
Por el contrario, los humanos, que tenemos hermosas capacidades de crear un mundo hermano dentro de nosotros y compararlo constantemente con el real (a partir de las sensaciones) hemos llegado a comprender que la extinción de especies, la contaminación y el abuso a nuestros semejantes es una consecuencia de nuestros actos y no de la carencia del exterior. Nuestra reacción, la de algunos, es replantear nuestra manera de encontrarnos con la Naturaleza y con nuestros semejantes.
El búfalo, empero, vive en nosotros y buscamos otros planetas que devorar y nos olvidamos que no es el contexto el cojo, sino nuestro espíritu soberbio y ciego.
Pensemos al hombre en relación contextual (él con sus sensaciones): tiene 3 tipos de relaciones:
Yo-Yo / Yo-Tú / Yo-Él
La primera es la raíz de las otras, está en relación directa con éstas y las tres se modifican entre sí. La segunda (Yo-Tú) te acoje o expulsa y da diversidad dentro de un grupo; a ésta la puedes modificar. La tercera (Yo-Él) te crea o destruye y te da identidad; ésta te modifica. El pasado está relacionado con la segunda (mundo del recuerdo), el presente con la primera (mundo de las sensaciones), la tercera con el futuro (fantasía).
La compasión frente a la adversidad (un Él total y completo, absorbente) nace de la transformación del otro (yo-él) como yo-tú. No podemos contra este Él devorador y pensamos mejor en apartarnos. Esto hace que nos apartemos de los otros (que viven en más peligro de caer en el Él) y nos acerquemos a otros (con menos peligro de caer en el Él). Estaría bien leer a Freud y apoyarme en él para entender mejor sus relaciones ello-yo-superyó.
Sentir compasión es ponernos en peligro de muerte, porque es aceptar que nos acercamos a una persona que está en más riesgo que nosotros. Nuestro instinto de superviviencia nos aleja, entonces, de los otros, diciéndonos que estaremos más a salvo solos (lejos del peligro simbolizado por ese otro que sufre).
La realidad es muy distinta y lo han aprendido los mamíferos (que sobrevivieron a los dinosaurios en épocas dramáticas). Si se va en grupo, es mejor, a menos que el grupo vaya en contra del individuo (dictadura). Tal vez por esta cualidad de ver "más allá de lo evidente" , de tener un mundo hermano dentro. Me pregunto si los seres humanos somos los únicos que vemos peligro en nuestro grupo y lo convertimos en parte de nuestro contexto tenebris, nuestro grupo yo-tú se convierte en un yo-él y los que forman parte de ese grupo se convierten en yo-tú enemigos... (Más adelante debería profundizar en la relación yo-tú / yo-yo / yo-él dentro de los grupos... por ejemplo, un grupo yo-tú tiene integrantes yo-él... yo-yo en un grupo yo-tú se vuelve yo-él... y viceversa)
Es por ello que, a pesar de ser sociales y de que nuestro instinto nos impulsa a ayudar al otro, al mismo tiempo, otro instinto nos hace alejarnos del otro
La concepción del mundo del hombre debe necesariamente dudar de sí misma, si aceptamos que la realidad interna se pelea con la "social" y con la absoluta. La interna entre más equilibrada esté entre la social y la absoluta y la desconocida, más eficiente será y menos ignorante, más sabia y flexible.
La realidad del Hombre es dual por naturaleza y por esa cualidad es siempre e infinitamente repetible (fractales), como un rayo que se bifurca y esa bifurcación crea bifurcaciones en sí misma, hasta el infinito.
Por eso, las relaciones de pareja (encontrar o aceptar al otro como yo-yo) son tan complicadas y desestabilizantes para el yo-yo. Porque estar frente al otro dentro de nosotros mismos modifica nuestra concepción de nosotros mismos.
Es posible que el aferramiento del cerebro a relacionar de la misma manera nuestro contexto con nuestras sensaciones tenga que ver. Más bein con los coordinadores mentales de estas realidades. ¿Cómo, si la mente coordinador dice X, aceptar que la realidad diga Y?
Volvemos a la necesidad constante de decidir debido a la contradicción. Sin contradicción, sin paradoja, sin encuentro, sin ironía no hay decisión, no hay movimiento.
Leer Adonis, seis notas al lado del viento. El poeta y su trabajo #30
Vejez
En la mañana vi correr un cordero
en la tarde, pasar a un caballero
en la noche
en la oscuridad
respiraba un alfarero
MayoCEROnueve
en la tarde, pasar a un caballero
en la noche
en la oscuridad
respiraba un alfarero
MayoCEROnueve
Mi sueño: memoria inflamada
Mi sueño, memoria inflamada
I
una dulzura amarga
me recorre el cuerpo
una suerte de resaca
de nostalgia helada
II
en tu lago reposé
con las rocas jugué
su perfume respiré
de las libélulas al sol
disfruté
acerqué
mi cara
(cansado de la orilla)
a la insondable profundidad de aquellas aguas
mi reflejo claro
cuasiperfecto:
la superficie, un espejo
¡qué frescura mojarse la cara!
¡qué idilio olvidarse
en una poca
de agua!
y mi sed cedió
al instante
y un frío placer recorrió
mi espalda:
eras tú sobre mí
y yo
en ti:
un beso sin escarcha.
y nada cambió
tu lago
era tu lago
y tú y yo caminábamos juntos
como antaño
en esos recuerdos futuros
esa mezcla de memoria y barro
y éramos los dos
los de siempre
sonriendo a la vida nerviosos
buscando calor
una chispa hermana
y eras tú y era yo
y ahora no somos nada
III
mi mente viaja cargada
de tus palabras
las extraña
nacidas entre
dientes
lengua
y agua
(dos alas me revuelven el estómago, ¿me habré comido una libélula y
sin saber morir
se ha quedado en mis entrañas?)
¿Qué has hecho, Amor, si eran tan suaves tus manos y se volvieron garras?
¿Qué he hecho yo sin saber olvidar con sangre, vino y agua?
no dejaré
venir este rencor
culpa incólume
no te odiaré
me abriste el corazón
entre inciensos
y campanas
¿Cómo te llevaré a mi silencio?
¿Cómo compartirte mi calma?
IV
vuelas dragón sin casa
te olvidas de tus sueños
enciendes tu corazón
no lo apagas
sueña dragón
sueña
sueña humo
sueña agua
calma tu fuego de alma
duerme dragón
duerme
duerme un rato
sin darme la espalda
no te seguiré
no hace falta
estaremos los dos
libres
entre verde, azul y montaña
esta es dragón
mi cosecha
fresca
de hombre y alma
soy joven, verde palma
una hormiga sin cigarra
mi cansado rigor, lo cargo yo
por no saber cómo encender
con tu cariño, mi esperanza
no te olvidaré dragón, jamás,
pero no te iré a buscar
entre oro, piedra y plata:
tu tesoro
al río vaya
MayoCEROnueve
I
una dulzura amarga
me recorre el cuerpo
una suerte de resaca
de nostalgia helada
II
en tu lago reposé
con las rocas jugué
su perfume respiré
de las libélulas al sol
disfruté
acerqué
mi cara
(cansado de la orilla)
a la insondable profundidad de aquellas aguas
mi reflejo claro
cuasiperfecto:
la superficie, un espejo
¡qué frescura mojarse la cara!
¡qué idilio olvidarse
en una poca
de agua!
y mi sed cedió
al instante
y un frío placer recorrió
mi espalda:
eras tú sobre mí
y yo
en ti:
un beso sin escarcha.
y nada cambió
tu lago
era tu lago
y tú y yo caminábamos juntos
como antaño
en esos recuerdos futuros
esa mezcla de memoria y barro
y éramos los dos
los de siempre
sonriendo a la vida nerviosos
buscando calor
una chispa hermana
y eras tú y era yo
y ahora no somos nada
III
mi mente viaja cargada
de tus palabras
las extraña
nacidas entre
dientes
lengua
y agua
(dos alas me revuelven el estómago, ¿me habré comido una libélula y
sin saber morir
se ha quedado en mis entrañas?)
¿Qué has hecho, Amor, si eran tan suaves tus manos y se volvieron garras?
¿Qué he hecho yo sin saber olvidar con sangre, vino y agua?
no dejaré
venir este rencor
culpa incólume
no te odiaré
me abriste el corazón
entre inciensos
y campanas
¿Cómo te llevaré a mi silencio?
¿Cómo compartirte mi calma?
IV
vuelas dragón sin casa
te olvidas de tus sueños
enciendes tu corazón
no lo apagas
sueña dragón
sueña
sueña humo
sueña agua
calma tu fuego de alma
duerme dragón
duerme
duerme un rato
sin darme la espalda
no te seguiré
no hace falta
estaremos los dos
libres
entre verde, azul y montaña
esta es dragón
mi cosecha
fresca
de hombre y alma
soy joven, verde palma
una hormiga sin cigarra
mi cansado rigor, lo cargo yo
por no saber cómo encender
con tu cariño, mi esperanza
no te olvidaré dragón, jamás,
pero no te iré a buscar
entre oro, piedra y plata:
tu tesoro
al río vaya
MayoCEROnueve
martes, 5 de mayo de 2009
Selva en el desierto
A Ecuador, a sus desiertos, sus picos y sus selvas
Caminando encontré 25 cocodrilos
en la calle bailaban
en los bares cantaban
en las ferias compraban
jugos, fruta y agua
Al amanecer su frescura acabó
uno aventuró
oasis en desierto soñar:
descubrió él cómo llorar
en la sequedad
gotas sin necedad.
(escucha su llanto / del frío mordido / por agua revivido)
En un oasis ya
convertido se ha
ese cocodrilo
se queda
su huella
de vida
sin espera
se queda
(también)
un oasis
una estela
esa lágrima joven
perene
rumbera
yo te lloraré
lágrimas de cocodrilo
no las secas jamás
ni las tristes verdá
yo te lloraré
lágrimas de cocodrilo
racimos de dátiles
hojas de guaraná
yo te lloraré
lágrimas del cocodrilo
enjuagareme
quizá
la sequedá
del destino
yo te lloraré
lágrimas de cocodrilo
tú nunca sabrás
donde yo me he metido
Quito, MayoCeroNueve
Caminando encontré 25 cocodrilos
en la calle bailaban
en los bares cantaban
en las ferias compraban
jugos, fruta y agua
Al amanecer su frescura acabó
uno aventuró
oasis en desierto soñar:
descubrió él cómo llorar
en la sequedad
gotas sin necedad.
(escucha su llanto / del frío mordido / por agua revivido)
En un oasis ya
convertido se ha
ese cocodrilo
se queda
su huella
de vida
sin espera
se queda
(también)
un oasis
una estela
esa lágrima joven
perene
rumbera
yo te lloraré
lágrimas de cocodrilo
no las secas jamás
ni las tristes verdá
yo te lloraré
lágrimas de cocodrilo
racimos de dátiles
hojas de guaraná
yo te lloraré
lágrimas del cocodrilo
enjuagareme
quizá
la sequedá
del destino
yo te lloraré
lágrimas de cocodrilo
tú nunca sabrás
donde yo me he metido
Quito, MayoCeroNueve
lunes, 4 de mayo de 2009
Congreso de Psicodrama en Quito
Sábado 2 de mayo
Máscaras y psicodrama. Conversando con Mario Buchbinder
Comenzó explicando que una máscara no es sólo una careta sobre la cara, es también la vestimenta, el maquillaje, la profesión, la nacionalidad e incluso el lenguaje. La máscara es una superficie que encubre una realidad profunda. Recordé, cómo no, El público de García Lorca donde explica que la profundidad es un cúmulo de superficies que se superponen. Esto me hace pensar ahora que sin máscara no hay profundidad, sin máscara, todo es superficie. La máscara, explica Buchbinder para finalizar con esta introducción, al mismo tiempo que oculta, revela.
El proceso de escoger una máscara tiene elementos télicos y transferenciales. Pensando que la tele es la comunicación sin transferencia. En ese momento me surgió una duda, existen dos tipos de máscaras. La primera es la máscara que lleva el otro (o yo mismo) que encubre mi “realidad”. La segunda máscara es ella misma, o el otro en su totalidad; el otro es una máscara y la máscara es el otro. El otro, si lo entendemos como una superficie, encubre una realidad más subjetiva, la mía. El otro, entonces, es mi máscara, mi superficie y me ayuda a observarme como soy, a profundidad.
El grupo de Buchbinder y Elena Matoso tiene un taller para crear máscaras (explicó, al final del taller su relación con las máscaras y el trabajo de su padre, a quien ayudaba de niño, haciendo muñecas de madera) que usan en teatro espontáneo y teatro público (¿o psicodrama público?). Las dos pautas técnicas para crearlas son: ubicar el lugar donde van los ojos y tener claro el sistema con el que se sostendrán.
Nace la pregunta: ¿la máscara es el rol?
Existe una relación entre la máscara y el rol. La máscara es la microscopía del rol, su raíz. La materia simbólica de donde nace el rol.
El trabajo artístico con máscara ayuda a profundizar aún más en las escenas. Por ejemplo, un paciente presenta la escena X y en vez de ponerla en acción inmediatamente se crean las máscaras para los diferentes yo auxiliares, se escogen las máscaras para ellos y se estudia la relación de la persona con las máscaras y no con los personajes vivos. Es un paso previo a la dramatización, que puede ayudar a personas que no estén listas para ella. Me imaginé una escena donde el trabajo de creación de máscaras pudiera llevar meses o años, creando además las diferentes máscaras de los yos auxiliares. La terapia, entonces sería descubrir la profanidad de los personajes dramáticos a través de la creación y comprensión de las máscaras que llevan puestas y no de la acción. Estaríamos hablando de un proceso de desenmascaramiento. Un padre puede tener una cara de ángel hacia el exterior de la familia y ser un demonio dentro, esta contradicción podría trabajarse de esta manera. Esto último son notas mías.
Las máscaras pueden ser utilizadas en todas las partes del cuerpo y del espacio dramático, no sólo como caretas. La máscara tiene una relación directa con el cuerpo y éste con el espacio, la relación entre máscara y espacio sólo es posible a través del cuerpo del actor.
Surgió una pregunta práctica sobre el uso de máscaras con personas drogodependientes. El participante se cuestionó si los pacientes no usarían las máscaras para enmascararse. Por ejemplo, cambiar la máscara del drogadicto por la del ladrón sin tener una evolución positiva. Mario explicó que esto pasaría si la máscara no está asociada a la independencia de la persona. Las máscaras por sí solas no hacen daño, se debe tener cuidado con la manera en la que se usan, son herramientas para alcanzar un objetivo y no un objetivo en sí mismas. La tarea del paciente no es crearse las máscaras que más le gusten sino utilizar las máscaras para dramatizar su pasado o futuro. Buchbinder comenta que la máscara sana sólo si está en escena con el otro.
En este momento me surgió se me conectó un cable con respecto a la drogodependencia. Moreno habla de la salud vincular entre personas, sin embargo, otro tema es la salud vincular entre mi yo y mi cuerpo; o entre el exterior y mi cuerpo. Ambos están relacionados.
Mario observa muchísimo los gestos de las personas (otras máscaras) y las usa para crear roles, como “vestuario”. Esto lo aprendí en Madrid en las clases de teatro gestual donde se crea utilería con el cuerpo, incluso el cuerpo mismo se comprende como el espacio escénico.
“No hay hombre sin máscara y las hay de vida y de muerte”
Mario ha trabajado con personas que tienen problemas de fobia. Por ejemplo un joven tímido que no dejó de hablar cuando se puso la máscara (alcoholismo y drogadicción) o con chicos agresivos o con problemas de columna o uniéndolo al tema de la familia.
Explica que existen tres modos de resolución de la escena dramática:
1ª Beckett – no hay resolución o la resolución ya está en el planteamiento (drama)
2ª Tragedia – final terrible
3ª Comedia – final feliz
La ética del psicodramatista, la bondad del psicodrama, explica, es permitir que la escena con su potencia dramática se realice. La bondad per se (final feliz, abrazo, sonrisas, aplausos) en el psicodrama es una ética falsay no cumple con los objetivos del psicodrama. El conflicto, señala es la base de la escena, debemos tener mucho cuidado en escoger los conflictos y potenciarlas dramáticamente.
Me surgió una duda sobre su trabajo. Siempre habló del paciente que usa la máscara, pero me pregunto si sería terapéutico también que el director o coordinador usara la máscara para descubrir ciertos elementos. Es decir, no ayudar a ponerse la máscara sino a convivir con ella. Esto, me indicó, es el trabajo del teatro espontáneo, él da la oportunidad de usar máscaras, pero nunca las lleva puestas.
Yo comencé a fantasear sobre una dramaterapia donde la máscara fuera usada en la vida diaria, donde se aprendieran roles en la terapia para después usarlos fuera. Usar la máscara para entrar en el mundo de los otros y no en el mundo propio. Esta idea me viene persiguiendo y espero poder materializarla en un taller teatral que tengo pensado para oficinas donde los participantes crearan personajes sanadores de sus contextos. Así podrían darse cuenta del valor del cambio de uno mismo.
Domingo 3 de mayo
Teatro espontáneo / Ana María Garavelli
El teatro espontáneo es una propuesta estética, política y terapéutica.
Tiene tres puntos básicos:
1. Circulación del protagonismo (dirección, actores, público, música)
2. Síntesis poética para alcanzar grandes públicos y potenciar la dramatización de la escena. Del recuerdo a la dramatización: Recuerdo / relato / síntesis poética / puesta en escena.
3. Tres elementos: articulación de un texto, acción y música.
Máscaras y psicodrama. Conversando con Mario Buchbinder
Comenzó explicando que una máscara no es sólo una careta sobre la cara, es también la vestimenta, el maquillaje, la profesión, la nacionalidad e incluso el lenguaje. La máscara es una superficie que encubre una realidad profunda. Recordé, cómo no, El público de García Lorca donde explica que la profundidad es un cúmulo de superficies que se superponen. Esto me hace pensar ahora que sin máscara no hay profundidad, sin máscara, todo es superficie. La máscara, explica Buchbinder para finalizar con esta introducción, al mismo tiempo que oculta, revela.
El proceso de escoger una máscara tiene elementos télicos y transferenciales. Pensando que la tele es la comunicación sin transferencia. En ese momento me surgió una duda, existen dos tipos de máscaras. La primera es la máscara que lleva el otro (o yo mismo) que encubre mi “realidad”. La segunda máscara es ella misma, o el otro en su totalidad; el otro es una máscara y la máscara es el otro. El otro, si lo entendemos como una superficie, encubre una realidad más subjetiva, la mía. El otro, entonces, es mi máscara, mi superficie y me ayuda a observarme como soy, a profundidad.
El grupo de Buchbinder y Elena Matoso tiene un taller para crear máscaras (explicó, al final del taller su relación con las máscaras y el trabajo de su padre, a quien ayudaba de niño, haciendo muñecas de madera) que usan en teatro espontáneo y teatro público (¿o psicodrama público?). Las dos pautas técnicas para crearlas son: ubicar el lugar donde van los ojos y tener claro el sistema con el que se sostendrán.
Nace la pregunta: ¿la máscara es el rol?
Existe una relación entre la máscara y el rol. La máscara es la microscopía del rol, su raíz. La materia simbólica de donde nace el rol.
El trabajo artístico con máscara ayuda a profundizar aún más en las escenas. Por ejemplo, un paciente presenta la escena X y en vez de ponerla en acción inmediatamente se crean las máscaras para los diferentes yo auxiliares, se escogen las máscaras para ellos y se estudia la relación de la persona con las máscaras y no con los personajes vivos. Es un paso previo a la dramatización, que puede ayudar a personas que no estén listas para ella. Me imaginé una escena donde el trabajo de creación de máscaras pudiera llevar meses o años, creando además las diferentes máscaras de los yos auxiliares. La terapia, entonces sería descubrir la profanidad de los personajes dramáticos a través de la creación y comprensión de las máscaras que llevan puestas y no de la acción. Estaríamos hablando de un proceso de desenmascaramiento. Un padre puede tener una cara de ángel hacia el exterior de la familia y ser un demonio dentro, esta contradicción podría trabajarse de esta manera. Esto último son notas mías.
Las máscaras pueden ser utilizadas en todas las partes del cuerpo y del espacio dramático, no sólo como caretas. La máscara tiene una relación directa con el cuerpo y éste con el espacio, la relación entre máscara y espacio sólo es posible a través del cuerpo del actor.
Surgió una pregunta práctica sobre el uso de máscaras con personas drogodependientes. El participante se cuestionó si los pacientes no usarían las máscaras para enmascararse. Por ejemplo, cambiar la máscara del drogadicto por la del ladrón sin tener una evolución positiva. Mario explicó que esto pasaría si la máscara no está asociada a la independencia de la persona. Las máscaras por sí solas no hacen daño, se debe tener cuidado con la manera en la que se usan, son herramientas para alcanzar un objetivo y no un objetivo en sí mismas. La tarea del paciente no es crearse las máscaras que más le gusten sino utilizar las máscaras para dramatizar su pasado o futuro. Buchbinder comenta que la máscara sana sólo si está en escena con el otro.
En este momento me surgió se me conectó un cable con respecto a la drogodependencia. Moreno habla de la salud vincular entre personas, sin embargo, otro tema es la salud vincular entre mi yo y mi cuerpo; o entre el exterior y mi cuerpo. Ambos están relacionados.
Mario observa muchísimo los gestos de las personas (otras máscaras) y las usa para crear roles, como “vestuario”. Esto lo aprendí en Madrid en las clases de teatro gestual donde se crea utilería con el cuerpo, incluso el cuerpo mismo se comprende como el espacio escénico.
“No hay hombre sin máscara y las hay de vida y de muerte”
Mario ha trabajado con personas que tienen problemas de fobia. Por ejemplo un joven tímido que no dejó de hablar cuando se puso la máscara (alcoholismo y drogadicción) o con chicos agresivos o con problemas de columna o uniéndolo al tema de la familia.
Explica que existen tres modos de resolución de la escena dramática:
1ª Beckett – no hay resolución o la resolución ya está en el planteamiento (drama)
2ª Tragedia – final terrible
3ª Comedia – final feliz
La ética del psicodramatista, la bondad del psicodrama, explica, es permitir que la escena con su potencia dramática se realice. La bondad per se (final feliz, abrazo, sonrisas, aplausos) en el psicodrama es una ética falsay no cumple con los objetivos del psicodrama. El conflicto, señala es la base de la escena, debemos tener mucho cuidado en escoger los conflictos y potenciarlas dramáticamente.
Me surgió una duda sobre su trabajo. Siempre habló del paciente que usa la máscara, pero me pregunto si sería terapéutico también que el director o coordinador usara la máscara para descubrir ciertos elementos. Es decir, no ayudar a ponerse la máscara sino a convivir con ella. Esto, me indicó, es el trabajo del teatro espontáneo, él da la oportunidad de usar máscaras, pero nunca las lleva puestas.
Yo comencé a fantasear sobre una dramaterapia donde la máscara fuera usada en la vida diaria, donde se aprendieran roles en la terapia para después usarlos fuera. Usar la máscara para entrar en el mundo de los otros y no en el mundo propio. Esta idea me viene persiguiendo y espero poder materializarla en un taller teatral que tengo pensado para oficinas donde los participantes crearan personajes sanadores de sus contextos. Así podrían darse cuenta del valor del cambio de uno mismo.
Domingo 3 de mayo
Teatro espontáneo / Ana María Garavelli
El teatro espontáneo es una propuesta estética, política y terapéutica.
Tiene tres puntos básicos:
1. Circulación del protagonismo (dirección, actores, público, música)
2. Síntesis poética para alcanzar grandes públicos y potenciar la dramatización de la escena. Del recuerdo a la dramatización: Recuerdo / relato / síntesis poética / puesta en escena.
3. Tres elementos: articulación de un texto, acción y música.
sábado, 2 de mayo de 2009
Congreso de Psicodrama en Quito
Viernes primero de mayo
Axiodrama – Máquina de límites
¿Cómo tratar/educar a los niños?
Hicimos una presentación formal, sentados, hablando de nosotros. Después caminamos en el espacio caóticamente y nos organizamos en grupos de 3 personas. Cada uno de los integrantes escogía una letra (Amor, Libertad, Responsabilidad). Nos juntamos las letras y escenificamos nuestros conceptos en su máxima expresión, sin tomar en cuenta los demás. El Amor hizo una escultura en movimiento que terminó agrupándonos en una rueda donde bailamos con sonidos, todos juntos, en una comunidad unida y rítmica. Los integrantes de la Libertad comenzamos juntos en el suelo, crecimos y cada uno voló libremente por el espacio jugando con el público: despeinándolos, moviéndolos y molestándolos un poco. La Responsabilidad hizo una escena de una familia responsable donde un joven, fuera de las responsabilidades de la familia (padre proveedor, madre organizadora e hijo hacetareas), buscaba la responsabilidad social. Fue el único grupo que vio las diferentes (positiva y negativa) expresiones de un mismo concepto: había ruptura dentro del grupo.
Aplaudimos y regresamos a formar las tríadas ALR donde planeamos unas máquinas. El primer grupo creó una máquina-escena de un niño (libertad) que aprendía a caminar: el amor lo cachaba y la responsabilidad lo hacía ir más lento, lo jalaba. El segundo grupo hizo una máquina donde la Libertad gritaba y se movía extrovertidamente; la Responsabilidad la jalaba para que no se fuera y el Amor regaba la máquina. El tercer grupo hicimos una regadera: el riego/agua era el amor que compartíamos con el resto del grupo, la libertad nos hacía movernos en círculos concéntricos y la responsabilidad nos proveía de unión y dirección/objetivo. El cuarto grupo escenificó una tienda de helados donde la R los hacía, la L los vendía y el A los repartía.
Escogimos la máquina 3 para continuar nuestro trabajo y un dueño/protagonista. El resto del grupo creó una escena de la vida del protagonista. La primera escena se trató de una mujer con cinco hijos, uno de ellos con problemas en la escuela que le hacía no cumplir con su trabajo al cien. La segunda escena fue un joven de 25 años que esperaba un hijo con su novia y era abusivo con ella, no la comprendía, no se ponía en sus zapatos. La máquina le hizo comprender las necesidades de ella y salieron a tomar un café y un helado amorosamente. En la tercera escena la jefa de la primera escena fue la protagonista y le enseñamos a entender a su empleada y a ayudarle. En la primera escena no quedó muy clara la participación de la máquina, era una escena compleja: la Libertad le hizo preocuparse menos por su hijo, la Responsabilidad le hizo cumplir con sus obligaciones del trabajo y la escuela de su hijo y el Amor hizo que no rompiera los lazos con la directora de la escuela, ni con su hijo ni con su jefa, le dio paciencia y perseverancia.
Hicimos un sharing después de bailar todos juntos (la jefa y la empleada de la última escena se fueron juntas a bailar salsa) y soltamos roles.
Las conclusiones fueron que necesitamos del equilibrio entre los tres elementos para sobrevivir. El trabajo fue una máquina hacia el exterior pero también se puede trabajar con el interior de la persona, cómo convivimos con estos tres conceptos dentro de nosotros.
Yo mando, yo soy responsable – yo escucho – yo no tengo tantas responsabilidades pero obedezco órdenes
En el trabajo con los jóvenes nos preguntábamos cómo hacerles entender sus responsabilidades sin autoritarismo o violencia. Ellos deben aprender a ser libres sin dañarse o a los demás. Demasiada libertad en los niños puede crear violencia hacia los padres.
En el plano social los tres conceptos podrían cambiarse por Solidaridad, Derechos y Obligaciones.
Bibliografía
1,2,3 Magia
Boris Zirculnyk (francés especializado en resiliencia)
Psicodrama / sociodrama en las organizaciones
Joceli Drummond
Rosi Ciasi
Andrea Claudia
En las organizaciones hay mucha distancia entre las personas, no debe trabajarse la emoción ni el mundo interno a menos que se conozca mucho el grupo y estén aclimatados con el tipo de trabajo. El reto es aliviar el vacío entre las personas.
El primer objetivo es trabajar en conjunto, el segundo es el uso eficiente de los recursos (energía) (dar leche a unos gatitos pantuflas, no sirve de nada)
Para empezar nos regalaron una estrella que representaba nuestras cualidades/competencias y las compartimos con los demás. Les decíamos nuestra competencia y ellos a nosotros intercambiándonos la estrellita. Nos sentamos e hicimos sharing.
Un defecto es un exceso de competencia.
Conocimiento
Habilidades (técnicas e interpersonales)
Actitudes
Reflexión (sobre C, H y A)
Métrica – Feedback – Evaluación mía o de la empresa
Dibujamos nuestro átomo social/laboral y escogimos una persona del mismo (en una empresa no podemos usar los nombres reales, sólo las características) y un screambean que representara la relación con esa persona. En grupos de tres personas explicamos la relación entre la imagen y la realidad. Pensamos en un consejo que nos daría esta persona, lo dijimos a los dos del grupo y ellos nos contestaron con una frase de apoyo o consejo.
Transformar
Resaltar
Eliminar
Mantener
Se pueden hacer sociometrías interesantes al comienzo para romper el hielo y direccionar el curso: ¿de qué quieres hablar? ¿qué trabajo tienes? Pensé en los cursos de redacción: ¿quiénes tienen problemas con acentos? ¿quiénes con redacción? Etc.
Hay 3 cosas que forman las empresas: Personas, los Procesos y las Relaciones (creo que este último era otro).
Un mensaje para los empleados: la empresa comienza y acaba contigo.
Psicodrama como arteterapia
Julia (BR)
¿Has jugado alguna vez con tierra? Este elemento era esencial para Julia, creía que la base de la arteterapia es el barro porque nos conecta con las emociones más primitivas.
Comenzamos caminando por el espacio, hicimos grupos de 5-6 personas desconocidas. Tomamos un cuadrito de barro y lo manejamos con nuestros ojos cerrados. Cada participante creó una figurilla y al finalizar observamos nuestra creaciones y platicamos sobre ellas. Cerramos de nuevo los ojos y tomamos el lugar de nuestro compañero de la izquierda para amoldar su figurilla, esto se repitió.
Hicimos un sharing rápido sobre lo que sentimos al ver nuestra figurilla moldeada por otras personas. A unos nos gustó a otros no. Una chica, la protagonista de dedazo, dijo que sentía rabia, frustración, energía explosiva.
Se hizo su escena, tomando ella el rol de un delfín (fue su figurilla y se identificaba con ella porque estos animales reaccionan muy violentamente si se les arremete). Se escogieron del público un león, un oso y una serpiente, animales con reacciones similares. Se les metió a todos en la selva y todos ellos atosigaban al delfín quien se escabullía entre los árboles. Se pidió a otro delfín entrar a jugar y el resto del público hizo un cerco haciendo sonidos de jungla. La escena no avanzaba y Julia preguntó qué sentíamos: ansiedad y aburrimiento fueron algunas respuestas. Entonces, para modificar esos sentimientos se aconsejó hacer llover para que los delfines pudieran ir al mar. Se hizo y todos nos convertimos en los animales que más nos gustaran (esto por iniciativa de un compañero/a). Nos movimos por el espacio, como al comienzo, pero interpretando nuestros animales queridos, Julia apagó la luz para mandarnos a dormir y poco después acabó la escena.
Había un descontento generalizado. El sharing que siguió la escena se extendió hasta el final de la clase, casi media hora. Algunos argüían que no se había entendido el ejercicio, que faltaron indicaciones o, en vez de improvisar, nos quedamos en espera de elementos del psicodrama clásico. Julia en ningún momento estuvo en control del grupo, la apabullamos. Comenzó a hablar de nuestros niños interiores, de cómo hubieran reaccionado los niños en una situación similar, no pregunta, sólo hacen, sólo viven los personajes sin esperar una escena de catarsis ni inversión de roles.
En mi opinión faltó un contrato o explicación inicial sobre el trabajo de Julia y el contexto del mismo. Nunca aclaró que no sería psicodrama (aunque lo decía en el título del curso) clásico sino escenificaciones libres sin objetivo claro, lugares para vivir una fantasía. También creo que las emociones que surgieron con el manejo del barro no se concluyeron ni llevaron a ningún puerto, el sharing no logró cerrar ni concluir. Se pasó inmediatamente del manejo de la tierra a la escena y las figurillas se quedaron en el suelo.
Dijo algo interesante sobre los niños: cuando un niño pide ayuda para terminar un trabajo es porque su autoestima está baja, sin embargo, cuando un niño trabaja con libertad, está sano. No estoy totalmente de acuerdo con esto porque un niño que pide ayuda muchas veces la necesita y el profesor puede subir la confianza del niño si le empuja, es una opinión muy personal. Además, hablaron de los niños que hacen una figurilla y se frustran cuando su compañero se las cambia, lo que necesita el niño, a mi parecer es la flexibilidad entre estos dos puntos: pedir ayuda y sentir la frustración, sabiendo que nada es perfecto y nada es perenne, todo se transforma.
Algo muy importante que aprendí es que el arte nos enseña a no tener apego a nuestras creaciones. Me parece algo de muchísima utilidad en la vida de cualquier persona.
Otro de las cuestionantes que surgieron fue que la ira de la chica no se alivió, de hecho no se representó porque ella se escabullía de los demás animales sin reaccionar con ira. Julia defendió el valor de sólo representar sin tener que llegar a la catarsis y otra compañera, especialista en arteterapia, indicó que esta chica estaba mostrando su enorme capacidad de aguantar agresiones hasta explotar, de no expresar su descontento. Sin embargo, fue la primera que habló, la más expresiva del grupo.
No hubo “como si” ni explicación sobre el niño interior que estaría trabajando en este taller. Se abrieron muchas cosas que no se cerraron, creo yo, se intentó abarcar mucho, se fue muy rápido y porque el grupo era grande y la técnica desconocida hubo tanto desentendimiento entre la profesora y el grupo y entre el grupo mismo.
Axiodrama – Máquina de límites
¿Cómo tratar/educar a los niños?
Hicimos una presentación formal, sentados, hablando de nosotros. Después caminamos en el espacio caóticamente y nos organizamos en grupos de 3 personas. Cada uno de los integrantes escogía una letra (Amor, Libertad, Responsabilidad). Nos juntamos las letras y escenificamos nuestros conceptos en su máxima expresión, sin tomar en cuenta los demás. El Amor hizo una escultura en movimiento que terminó agrupándonos en una rueda donde bailamos con sonidos, todos juntos, en una comunidad unida y rítmica. Los integrantes de la Libertad comenzamos juntos en el suelo, crecimos y cada uno voló libremente por el espacio jugando con el público: despeinándolos, moviéndolos y molestándolos un poco. La Responsabilidad hizo una escena de una familia responsable donde un joven, fuera de las responsabilidades de la familia (padre proveedor, madre organizadora e hijo hacetareas), buscaba la responsabilidad social. Fue el único grupo que vio las diferentes (positiva y negativa) expresiones de un mismo concepto: había ruptura dentro del grupo.
Aplaudimos y regresamos a formar las tríadas ALR donde planeamos unas máquinas. El primer grupo creó una máquina-escena de un niño (libertad) que aprendía a caminar: el amor lo cachaba y la responsabilidad lo hacía ir más lento, lo jalaba. El segundo grupo hizo una máquina donde la Libertad gritaba y se movía extrovertidamente; la Responsabilidad la jalaba para que no se fuera y el Amor regaba la máquina. El tercer grupo hicimos una regadera: el riego/agua era el amor que compartíamos con el resto del grupo, la libertad nos hacía movernos en círculos concéntricos y la responsabilidad nos proveía de unión y dirección/objetivo. El cuarto grupo escenificó una tienda de helados donde la R los hacía, la L los vendía y el A los repartía.
Escogimos la máquina 3 para continuar nuestro trabajo y un dueño/protagonista. El resto del grupo creó una escena de la vida del protagonista. La primera escena se trató de una mujer con cinco hijos, uno de ellos con problemas en la escuela que le hacía no cumplir con su trabajo al cien. La segunda escena fue un joven de 25 años que esperaba un hijo con su novia y era abusivo con ella, no la comprendía, no se ponía en sus zapatos. La máquina le hizo comprender las necesidades de ella y salieron a tomar un café y un helado amorosamente. En la tercera escena la jefa de la primera escena fue la protagonista y le enseñamos a entender a su empleada y a ayudarle. En la primera escena no quedó muy clara la participación de la máquina, era una escena compleja: la Libertad le hizo preocuparse menos por su hijo, la Responsabilidad le hizo cumplir con sus obligaciones del trabajo y la escuela de su hijo y el Amor hizo que no rompiera los lazos con la directora de la escuela, ni con su hijo ni con su jefa, le dio paciencia y perseverancia.
Hicimos un sharing después de bailar todos juntos (la jefa y la empleada de la última escena se fueron juntas a bailar salsa) y soltamos roles.
Las conclusiones fueron que necesitamos del equilibrio entre los tres elementos para sobrevivir. El trabajo fue una máquina hacia el exterior pero también se puede trabajar con el interior de la persona, cómo convivimos con estos tres conceptos dentro de nosotros.
Yo mando, yo soy responsable – yo escucho – yo no tengo tantas responsabilidades pero obedezco órdenes
En el trabajo con los jóvenes nos preguntábamos cómo hacerles entender sus responsabilidades sin autoritarismo o violencia. Ellos deben aprender a ser libres sin dañarse o a los demás. Demasiada libertad en los niños puede crear violencia hacia los padres.
En el plano social los tres conceptos podrían cambiarse por Solidaridad, Derechos y Obligaciones.
Bibliografía
1,2,3 Magia
Boris Zirculnyk (francés especializado en resiliencia)
Psicodrama / sociodrama en las organizaciones
Joceli Drummond
Rosi Ciasi
Andrea Claudia
En las organizaciones hay mucha distancia entre las personas, no debe trabajarse la emoción ni el mundo interno a menos que se conozca mucho el grupo y estén aclimatados con el tipo de trabajo. El reto es aliviar el vacío entre las personas.
El primer objetivo es trabajar en conjunto, el segundo es el uso eficiente de los recursos (energía) (dar leche a unos gatitos pantuflas, no sirve de nada)
Para empezar nos regalaron una estrella que representaba nuestras cualidades/competencias y las compartimos con los demás. Les decíamos nuestra competencia y ellos a nosotros intercambiándonos la estrellita. Nos sentamos e hicimos sharing.
Un defecto es un exceso de competencia.
Conocimiento
Habilidades (técnicas e interpersonales)
Actitudes
Reflexión (sobre C, H y A)
Métrica – Feedback – Evaluación mía o de la empresa
Dibujamos nuestro átomo social/laboral y escogimos una persona del mismo (en una empresa no podemos usar los nombres reales, sólo las características) y un screambean que representara la relación con esa persona. En grupos de tres personas explicamos la relación entre la imagen y la realidad. Pensamos en un consejo que nos daría esta persona, lo dijimos a los dos del grupo y ellos nos contestaron con una frase de apoyo o consejo.
Transformar
Resaltar
Eliminar
Mantener
Se pueden hacer sociometrías interesantes al comienzo para romper el hielo y direccionar el curso: ¿de qué quieres hablar? ¿qué trabajo tienes? Pensé en los cursos de redacción: ¿quiénes tienen problemas con acentos? ¿quiénes con redacción? Etc.
Hay 3 cosas que forman las empresas: Personas, los Procesos y las Relaciones (creo que este último era otro).
Un mensaje para los empleados: la empresa comienza y acaba contigo.
Psicodrama como arteterapia
Julia (BR)
¿Has jugado alguna vez con tierra? Este elemento era esencial para Julia, creía que la base de la arteterapia es el barro porque nos conecta con las emociones más primitivas.
Comenzamos caminando por el espacio, hicimos grupos de 5-6 personas desconocidas. Tomamos un cuadrito de barro y lo manejamos con nuestros ojos cerrados. Cada participante creó una figurilla y al finalizar observamos nuestra creaciones y platicamos sobre ellas. Cerramos de nuevo los ojos y tomamos el lugar de nuestro compañero de la izquierda para amoldar su figurilla, esto se repitió.
Hicimos un sharing rápido sobre lo que sentimos al ver nuestra figurilla moldeada por otras personas. A unos nos gustó a otros no. Una chica, la protagonista de dedazo, dijo que sentía rabia, frustración, energía explosiva.
Se hizo su escena, tomando ella el rol de un delfín (fue su figurilla y se identificaba con ella porque estos animales reaccionan muy violentamente si se les arremete). Se escogieron del público un león, un oso y una serpiente, animales con reacciones similares. Se les metió a todos en la selva y todos ellos atosigaban al delfín quien se escabullía entre los árboles. Se pidió a otro delfín entrar a jugar y el resto del público hizo un cerco haciendo sonidos de jungla. La escena no avanzaba y Julia preguntó qué sentíamos: ansiedad y aburrimiento fueron algunas respuestas. Entonces, para modificar esos sentimientos se aconsejó hacer llover para que los delfines pudieran ir al mar. Se hizo y todos nos convertimos en los animales que más nos gustaran (esto por iniciativa de un compañero/a). Nos movimos por el espacio, como al comienzo, pero interpretando nuestros animales queridos, Julia apagó la luz para mandarnos a dormir y poco después acabó la escena.
Había un descontento generalizado. El sharing que siguió la escena se extendió hasta el final de la clase, casi media hora. Algunos argüían que no se había entendido el ejercicio, que faltaron indicaciones o, en vez de improvisar, nos quedamos en espera de elementos del psicodrama clásico. Julia en ningún momento estuvo en control del grupo, la apabullamos. Comenzó a hablar de nuestros niños interiores, de cómo hubieran reaccionado los niños en una situación similar, no pregunta, sólo hacen, sólo viven los personajes sin esperar una escena de catarsis ni inversión de roles.
En mi opinión faltó un contrato o explicación inicial sobre el trabajo de Julia y el contexto del mismo. Nunca aclaró que no sería psicodrama (aunque lo decía en el título del curso) clásico sino escenificaciones libres sin objetivo claro, lugares para vivir una fantasía. También creo que las emociones que surgieron con el manejo del barro no se concluyeron ni llevaron a ningún puerto, el sharing no logró cerrar ni concluir. Se pasó inmediatamente del manejo de la tierra a la escena y las figurillas se quedaron en el suelo.
Dijo algo interesante sobre los niños: cuando un niño pide ayuda para terminar un trabajo es porque su autoestima está baja, sin embargo, cuando un niño trabaja con libertad, está sano. No estoy totalmente de acuerdo con esto porque un niño que pide ayuda muchas veces la necesita y el profesor puede subir la confianza del niño si le empuja, es una opinión muy personal. Además, hablaron de los niños que hacen una figurilla y se frustran cuando su compañero se las cambia, lo que necesita el niño, a mi parecer es la flexibilidad entre estos dos puntos: pedir ayuda y sentir la frustración, sabiendo que nada es perfecto y nada es perenne, todo se transforma.
Algo muy importante que aprendí es que el arte nos enseña a no tener apego a nuestras creaciones. Me parece algo de muchísima utilidad en la vida de cualquier persona.
Otro de las cuestionantes que surgieron fue que la ira de la chica no se alivió, de hecho no se representó porque ella se escabullía de los demás animales sin reaccionar con ira. Julia defendió el valor de sólo representar sin tener que llegar a la catarsis y otra compañera, especialista en arteterapia, indicó que esta chica estaba mostrando su enorme capacidad de aguantar agresiones hasta explotar, de no expresar su descontento. Sin embargo, fue la primera que habló, la más expresiva del grupo.
No hubo “como si” ni explicación sobre el niño interior que estaría trabajando en este taller. Se abrieron muchas cosas que no se cerraron, creo yo, se intentó abarcar mucho, se fue muy rápido y porque el grupo era grande y la técnica desconocida hubo tanto desentendimiento entre la profesora y el grupo y entre el grupo mismo.
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